AFP en Perú, Importación Chilena Fracasada
Poco a poco, el debate sobre la libre desafiliación de las AFP para volver al sistema nacional de pensiones está constatando que, en verdad, el problema es bastante mayor: la reforma de principios de los 90 no pudo solucionar el problema y el sistema pensionario debe reformarse, como también lo acaba de proponer Unidad Nacional.
Primero, porque en el Perú los afiliados a algún sistema de pensiones solo alcanzan el 25% de la población. El resto, sobre todo en zonas rurales, no tiene cobertura alguna que le permita enfrentar los años de vejez. El Banco Mundial, que ha estudiado el tema, propone que, a los pilares existentes (el sistema privado y el público) se incorpore un tercero que permita la ampliación de la cobertura.
Segundo, los trabajadores peruanos fueron despojados de miles de millones de dólares en 1998, cuando el gobierno de Fujimori resolvió que la deuda del Estado al Instituto Peruano de Seguridad Social era de solo US$ 1,900 millones, lo que convalidó con los Decretos de Urgencia 034-98 y 043-1998. Recordemos que el Estado utilizó los fondos del IPSS para construir carreteras (Lima- Pucusana-Cerro Azul), el Centro Cívico y obras diversas de todo tipo.
Diversos analistas afirman que el valor actual de esa deuda es superior a los US$ 20,000 millones. Carlos Adrianzén, de la UPC, dijo hace poco que esas pérdidas representan un valor actuarial estimado en unos US$ 30,000 millones (Perú.21, 08/02/2006). Por tanto, así como se reconoce “religiosamente” la deuda a los acreedores externos, el Estado debe reconocer esa deuda interna. Si eso se hiciera, entonces cesaría la cantaleta de que “no hay dinero para pagar a los pensionistas”. ¿Qué dicen de este tema específico los candidatos a la Presidencia?
Tercero, el sistema privado de pensiones tiene poca competencia, lo que hace que las comisiones sean las más caras de América Latina. La reciente entrada de una nueva AFP ha reducido las comisiones pero no al nivel suficiente. En Chile, el candidato Sebastián Piñera, creador de las AFP, dijo en el reciente debate presidencial: “por cada peso que un trabajador pone de ahorro para su pensión, paga 20 centavos en comisiones. Falta competencia. Está demasiado concentrada la industria” (20/10/2005).
Cuarto, en el debate sobre la libre desafiliación de las AFP está de por medio la libertad de los trabajadores de elegir el sistema de pensiones que más les convenga. La derecha dice que este planteamiento es “electorero” porque solo persigue ganar votos. Falso. La libre desafiliación se viene discutiendo en el Congreso desde hace tres años, pero los “lobbies” consiguieron bloquear y postergar la votación.
Quinto, los trabajadores y pensionistas que están en las AFP tienen el derecho de decidir hoy la desafiliación y no cuando se jubilan, como propone el Ejecutivo. La diferencia entre los aportes al sistema privado (8% hasta el 2005 y 10% desde el 2006) y al sistema público (13%) debe ser financiada con un préstamo blando y de largo plazo, para que no exista desfinanciamiento.
Además, debe considerarse que, para aquellos que se desafilien de las AFP, una parte de las comisiones pagadas les deben ser devueltas para que formen parte de los fondos con que se trasladan al sistema público. Si la AFP ya no va a administrar ese fondo, ¿por qué se va a quedar con el íntegro de las comisiones ya pagadas?
Este planteamiento fue respaldado por el BCR cuando se le requirió opinión por parte de la Comisión de Seguridad Social del Congreso: “no se debe contabilizar el íntegro de la comisión como ingreso del período; solo una parte debe considerarse así y el saldo debe registrarse en una cuenta de ingresos diferidos, de modo que los ingresos vayan siendo devengados de acuerdo a los períodos de administración efectiva del Fondo de Pensiones (principio del devengado)” (Proyecto de Ley Nº 9709/2003-CR).
En síntesis, se puede apreciar que solo está comenzando el debate que debe llevar a una reforma integral del sistema de pensiones, público y privado.
Primero, porque en el Perú los afiliados a algún sistema de pensiones solo alcanzan el 25% de la población. El resto, sobre todo en zonas rurales, no tiene cobertura alguna que le permita enfrentar los años de vejez. El Banco Mundial, que ha estudiado el tema, propone que, a los pilares existentes (el sistema privado y el público) se incorpore un tercero que permita la ampliación de la cobertura.
Segundo, los trabajadores peruanos fueron despojados de miles de millones de dólares en 1998, cuando el gobierno de Fujimori resolvió que la deuda del Estado al Instituto Peruano de Seguridad Social era de solo US$ 1,900 millones, lo que convalidó con los Decretos de Urgencia 034-98 y 043-1998. Recordemos que el Estado utilizó los fondos del IPSS para construir carreteras (Lima- Pucusana-Cerro Azul), el Centro Cívico y obras diversas de todo tipo.
Diversos analistas afirman que el valor actual de esa deuda es superior a los US$ 20,000 millones. Carlos Adrianzén, de la UPC, dijo hace poco que esas pérdidas representan un valor actuarial estimado en unos US$ 30,000 millones (Perú.21, 08/02/2006). Por tanto, así como se reconoce “religiosamente” la deuda a los acreedores externos, el Estado debe reconocer esa deuda interna. Si eso se hiciera, entonces cesaría la cantaleta de que “no hay dinero para pagar a los pensionistas”. ¿Qué dicen de este tema específico los candidatos a la Presidencia?
Tercero, el sistema privado de pensiones tiene poca competencia, lo que hace que las comisiones sean las más caras de América Latina. La reciente entrada de una nueva AFP ha reducido las comisiones pero no al nivel suficiente. En Chile, el candidato Sebastián Piñera, creador de las AFP, dijo en el reciente debate presidencial: “por cada peso que un trabajador pone de ahorro para su pensión, paga 20 centavos en comisiones. Falta competencia. Está demasiado concentrada la industria” (20/10/2005).
Cuarto, en el debate sobre la libre desafiliación de las AFP está de por medio la libertad de los trabajadores de elegir el sistema de pensiones que más les convenga. La derecha dice que este planteamiento es “electorero” porque solo persigue ganar votos. Falso. La libre desafiliación se viene discutiendo en el Congreso desde hace tres años, pero los “lobbies” consiguieron bloquear y postergar la votación.
Quinto, los trabajadores y pensionistas que están en las AFP tienen el derecho de decidir hoy la desafiliación y no cuando se jubilan, como propone el Ejecutivo. La diferencia entre los aportes al sistema privado (8% hasta el 2005 y 10% desde el 2006) y al sistema público (13%) debe ser financiada con un préstamo blando y de largo plazo, para que no exista desfinanciamiento.
Además, debe considerarse que, para aquellos que se desafilien de las AFP, una parte de las comisiones pagadas les deben ser devueltas para que formen parte de los fondos con que se trasladan al sistema público. Si la AFP ya no va a administrar ese fondo, ¿por qué se va a quedar con el íntegro de las comisiones ya pagadas?
Este planteamiento fue respaldado por el BCR cuando se le requirió opinión por parte de la Comisión de Seguridad Social del Congreso: “no se debe contabilizar el íntegro de la comisión como ingreso del período; solo una parte debe considerarse así y el saldo debe registrarse en una cuenta de ingresos diferidos, de modo que los ingresos vayan siendo devengados de acuerdo a los períodos de administración efectiva del Fondo de Pensiones (principio del devengado)” (Proyecto de Ley Nº 9709/2003-CR).
En síntesis, se puede apreciar que solo está comenzando el debate que debe llevar a una reforma integral del sistema de pensiones, público y privado.
fuente diario La República de Perú
Etiquetas: perú